Un autoanálisis previo y preparar algunas preguntas indispensables pueden ser la clave.
Sin duda alguna, una de las situaciones que genera más temor y pone los nervios a tope en las personas jóvenes, es afrontar su primer proceso de selección.
Este momento por el que todos tenemos que pasar en algún instante siempre estará lleno de incertidumbre, pero teniendo en cuenta algunas claves, puede pasar de ser una experiencia tortuosa a un recuerdo memorable y satisfactorio.
En primer lugar hay que tener en cuenta que previo al frente a frente con las personas de Recursos Humanos, hay que realizar un autoanálisis que nos permita observar nuestras debilidades y fortalezas.
La forma más fácil de saberlo es recordar aquellos aspectos que durante la etapa académica nos hacían fuertes o representaban algún tipo de dificultad en nuestro proceso. Asimismo, la etapa de la práctica profesional puede ser un buen termómetro en qué somos buenos.
Según Natalia Bonilla, consultora Junior de E-hunters, posterior a esto las personas deben preparar algunas preguntas que generalmente se hacen durante la entrevista.
"Comúnmente se pregunta por todo aquello que tiene que ver con el ámbito personal y familiar, así como los gustos y aficiones. Otro aspecto por el que se indaga frecuentemente, es el del segundo idioma, algo que en las compañías actuales es muy valorado y finalmente, la experiencia adquirida", agrega Bonilla.
Precisamente el tema de la experiencia laboral es algo que genera dudas, ya que en muchos casos los recién graduados no han trabajado y no saben qué responder ante esta inquietud de los entrevistadores.
"Algo fundamental es hablar de esos logros académicos o situaciones significativas que se tuvieron durante el paso por la universidad, esta será una buena forma de demostrar las fortalezas y competencias que se tienen", explica la consultora de E-hunters.
En este punto hay que aclarar que previamente los entrevistadores saben de antemano que la persona no tiene recorrido laboral, pero sí algunos objetivos conseguidos tanto a nivel educativo como personal que dejan ver mucho del ser humano que hay detrás.
Finalmente, una recomendación fundamental para que esto no ocurra es realizar la práctica profesional, en la actualidad algunos estudiantes prefieren evitar esta experiencia y la combinan con otras modalidades que les ofrecen sus centros educativos.
5 preguntas que puede prepararA continuación le presentamos un listado de posibles interrogantes que le pueden hacer durante su primera entrevista de trabajo:
1. ¿Cuáles son sus mayores defectos tanto personales como
profesionales?
2. ¿Cuál ha sido la persona que más ha influido en su vida?
3. ¿Por qué desea trabajar en nuestra compañía?
4. ¿Por qué cree que es el mejor candidato para esta vacante?
5. Hábleme de sus gustos y aficiones
Andrés Quintero
Este momento por el que todos tenemos que pasar en algún instante siempre estará lleno de incertidumbre, pero teniendo en cuenta algunas claves, puede pasar de ser una experiencia tortuosa a un recuerdo memorable y satisfactorio.
En primer lugar hay que tener en cuenta que previo al frente a frente con las personas de Recursos Humanos, hay que realizar un autoanálisis que nos permita observar nuestras debilidades y fortalezas.
La forma más fácil de saberlo es recordar aquellos aspectos que durante la etapa académica nos hacían fuertes o representaban algún tipo de dificultad en nuestro proceso. Asimismo, la etapa de la práctica profesional puede ser un buen termómetro en qué somos buenos.
Según Natalia Bonilla, consultora Junior de E-hunters, posterior a esto las personas deben preparar algunas preguntas que generalmente se hacen durante la entrevista.
"Comúnmente se pregunta por todo aquello que tiene que ver con el ámbito personal y familiar, así como los gustos y aficiones. Otro aspecto por el que se indaga frecuentemente, es el del segundo idioma, algo que en las compañías actuales es muy valorado y finalmente, la experiencia adquirida", agrega Bonilla.
Precisamente el tema de la experiencia laboral es algo que genera dudas, ya que en muchos casos los recién graduados no han trabajado y no saben qué responder ante esta inquietud de los entrevistadores.
"Algo fundamental es hablar de esos logros académicos o situaciones significativas que se tuvieron durante el paso por la universidad, esta será una buena forma de demostrar las fortalezas y competencias que se tienen", explica la consultora de E-hunters.
En este punto hay que aclarar que previamente los entrevistadores saben de antemano que la persona no tiene recorrido laboral, pero sí algunos objetivos conseguidos tanto a nivel educativo como personal que dejan ver mucho del ser humano que hay detrás.
Finalmente, una recomendación fundamental para que esto no ocurra es realizar la práctica profesional, en la actualidad algunos estudiantes prefieren evitar esta experiencia y la combinan con otras modalidades que les ofrecen sus centros educativos.
5 preguntas que puede prepararA continuación le presentamos un listado de posibles interrogantes que le pueden hacer durante su primera entrevista de trabajo:
1. ¿Cuáles son sus mayores defectos tanto personales como
profesionales?
2. ¿Cuál ha sido la persona que más ha influido en su vida?
3. ¿Por qué desea trabajar en nuestra compañía?
4. ¿Por qué cree que es el mejor candidato para esta vacante?
5. Hábleme de sus gustos y aficiones
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